Sintonizando emisoras, mientras trataba de mantenerse calmada en el atasco, sonó The Boxer, una canción de Simon & Garfunkel que desde niña siempre le gustó y por ironías de la vida, años más tarde, una parte se conviritió en realidad
Con delicadeza como si de un gran tesoro se tratara, Georgina quitaba el polvo y sacaba brillo a los numerosos trofeos, algunos la hacían sonreir porque su hijo los consiguió surfeando…otros en competiciones de moto; pero un halo de ternura y tristeza se apoderaba de ella cuando pensaba en el resto. Tenía tantas esperanzas en el futuro, como todos los padres, cuando el chico, de repente, decidió dejar de estudiar y lo que había sido la practica deportiva del Kárate se transformó en boxeo… en la razón de su vida.
A excepción de dos veces, siempre ganó por KO hasta llegar a convertirse en campeón de su pais...En su corazón albergaba la esperanza de que Georgina fuera a verlo; pero a ella le resultaba imposible ver como su hijo se peleaba como un animal…
Cuando combatía, siempre había alguien que la llamaba para decirle que Eduardo estaba bien y de nuevo era el ganador. Tras la celebración, al llegar a casa en la madrugada, con la luz apagada se acercaba a darle un beso mientras ella simulaba despertarse. Al encender la luz, veía a su hijo izando el trofeo…y, sin otra opción, se levantaba a felicitarlo y abrazarlo
Cuando Eduardo olvidaba meter la ropa en el lavadora, Georgina, al siguiente día, abría la bolsa de deporte con el estómago encogido porque eran varias las veces que veía una toalla ensangrentada… Lágrimas silenciosas caían por sus mejillas. Un dolor indescriptible se apoderaba de ella...
En la actualidad falta el más bonito de los trofeos. Eduardo lo metió en el nicho de su mejor amigo cuando falleció en un accidente de tráfico. Ese terrible suceso le hizo madurar tanto que comprendió a Greorgina y abandonó el boxeo.
Oteaba Auer
Dejo un vídeo de la canción The Boxer. ¡un temazo! delicado, suave, incluso dulce, a pesar de la crudeza de la letra.
Con delicadeza como si de un gran tesoro se tratara, Georgina quitaba el polvo y sacaba brillo a los numerosos trofeos, algunos la hacían sonreir porque su hijo los consiguió surfeando…otros en competiciones de moto; pero un halo de ternura y tristeza se apoderaba de ella cuando pensaba en el resto. Tenía tantas esperanzas en el futuro, como todos los padres, cuando el chico, de repente, decidió dejar de estudiar y lo que había sido la practica deportiva del Kárate se transformó en boxeo… en la razón de su vida.
A excepción de dos veces, siempre ganó por KO hasta llegar a convertirse en campeón de su pais...En su corazón albergaba la esperanza de que Georgina fuera a verlo; pero a ella le resultaba imposible ver como su hijo se peleaba como un animal…
Cuando combatía, siempre había alguien que la llamaba para decirle que Eduardo estaba bien y de nuevo era el ganador. Tras la celebración, al llegar a casa en la madrugada, con la luz apagada se acercaba a darle un beso mientras ella simulaba despertarse. Al encender la luz, veía a su hijo izando el trofeo…y, sin otra opción, se levantaba a felicitarlo y abrazarlo
Cuando Eduardo olvidaba meter la ropa en el lavadora, Georgina, al siguiente día, abría la bolsa de deporte con el estómago encogido porque eran varias las veces que veía una toalla ensangrentada… Lágrimas silenciosas caían por sus mejillas. Un dolor indescriptible se apoderaba de ella...
En la actualidad falta el más bonito de los trofeos. Eduardo lo metió en el nicho de su mejor amigo cuando falleció en un accidente de tráfico. Ese terrible suceso le hizo madurar tanto que comprendió a Greorgina y abandonó el boxeo.
Oteaba Auer
Dejo un vídeo de la canción The Boxer. ¡un temazo! delicado, suave, incluso dulce, a pesar de la crudeza de la letra.
Sólo soy un chico pobre
Aunque casi nunca se cuenta mi historia
He malgastado mi resistencia por un puñado de murmullos
Que son las promesas Todo mentiras y bromas
Aún así, un hombre oye lo que quiere oír e ignora el resto
Cuando me fui de casaY de mi familia No era más que un niño
En compañía de extraños
En el silencio de una estación de ferrocarril, huyendo asustado sin llamar la atención
Buscando los barrios más pobres donde va la gente harapienta
Buscando los lugaresQue sólo ellos conocerían
Pidiendo sólo el sueldo mínimo voy buscando un trabajo pero no recibo ofertas
Tan sólo insinuaciones de las putas en la Séptima Avenida
Declaro que hubo momentos en los que me sentía tan solo que busqué consuelo ahí
Estoy organizando mi ropa de invierno y deseando estar decamino a casa
Donde los inviernos neoyorquinos no me sangran Me dirijo de camino a casa
En el claro permanece de pie un boxeador
Y un luchador profesional
Y lleva los recuerdos
De cada guante que le tumbó
O le cortó hasta que gritó
En su ira y en su vergüenza"Me voy, me voy
Pero el luchador aún permanece
Hola Oteaba! Cornelivs ha vuelto, os he echado de menos!
ResponderEliminarUn beso
El texto es conmovedor y la canción, muy bella.
ResponderEliminarMe encantó leerte.
Un abrazo.
Hola.
ResponderEliminarBoxear consiste en ser golpeado, pero también en golpear; como lo que hacemos en esta vida desde que nacemos hasta que morimos. Pero esta metáfora contiene demasiada rabia como para descargarla sobre un semejante.
Saludos.
Que bello escrito Oteaba amiga.
ResponderEliminarSiempre he considerado al boxeo , no como deporte, pues se supone que cuando practicas uno de ellos, te aportarà, desarrollo, aprendizaje,fìsicamente hablando, y no dolor, ni menos muerte.
Por lo mismo para mi, no es sano, y todo deporte para serlo, debe aportarte experiencias positivas y obviamente salud a tu cuerpo.
Gracias por tus càlidas palabras en mi blog, y por tus sinceros deseos.
Te dejo un besito en miel amiga
Agualuna
Hola Oteaba...
ResponderEliminarPrecioso texto.
A mí el boxeo me parece muy violento, pero aún recuerdo cuando lo echaban en la tele.
Una tarde, a la hoia de comer, hacían un combate en Canal +. Nos pusimos a comer en el comedor, y mi padre puso la tv para ver el combate mientras comíamos.
Yo era una cría, pero cambié el canal. Mi padre se enfadó. Yo le dije que no quería ver un espectáculo así mientras comía...
Al menos mi padre lo entendió.
Sin embargo hay gente que cuanto más sangre, más parece gustarle....
Qué cosas...
Yo es que soy muy sensible...
OTEABA, triste historia la que nos cuentas hoy... la canción es preciosa, a mí también me gustó siempre. Un beso.
ResponderEliminarCornelius, me alegra que estés de neuvo por estos lares:)
ResponderEliminarBesos
RAQUEL:
Gracias por pasarte y por el comentario.:)
Besos preciosa
JUAN LUIS:
No creo que todo el mundo pase la vida golpeando a los semejantes. Más bien la vida, a veces, nos lleva por caminos que nos dan donde más nos duele...
Saludos
AGUALUNA:
Eso es lo que debiera ser el deporte y no ésto otro; pero así lo han establecido quienes tienen poderes para hacerlo.:)
Un beso grande preciosa
ELENA:
La verdad es que tu padre no podía hacer otra cosa que comprender lo desagradable que te reusultaba ver dos personas dándose golpes, fuera o no la hora de comer...
El morbo de la sangre se da en muchos "deportes"...Mira le palcer que sienten los aficionados a los toros...
Besos guapa.
GINEBRA:
A mi tambien me lo parece; pero, a veces, algo mucho más triste, logra una reacción positiva como fué la trágica muerte de su amigo
Nunca he entendido el boxeo. No veo dónde está el placer o la deportividad, pero, de tu post, me quedo con el eterno sufrimiento de las madres, que no acaba nunca. Y es que, quizá, nos damos cuenta tarde de que los hijos no son una pertenencia: son libres para marcar su camino y éste, casi nunca coincide con el que, en nuestros deseos, les habíamos marcado. Y, si llega a coincidir, creo que tampoco es bueno..
ResponderEliminarUn beso
Precioso post. Nunca he entendido el boxeo ni su filosofia. En fin...
ResponderEliminarMuakk
Oteaba querida, no sé cuanta importancia le darás, pero éste es el primer blog que visito despues del ingreso hospitalario. Una historia triste cargada de ternura. Leerla me ha emocionado.
ResponderEliminarGracias por tan delicado relato
Cuídate;)
Un beso
He sentido un profundo escalofrio y una gran ternura por este relato.
ResponderEliminarCada guante que nos tumbó, cada murmullo que nos mató...
Otea, "me paro a escuchar entre las voces, una" y la tuya es hermosa.
Besitos.
significativo, y muy profundo es como arma de doble fila, no sé si me explico pero me encanta como relatas su camino
ResponderEliminarun abrazo y gracias por tu visitas en mi blog
Beatriz, creo que pronto somos conscientes de que no nos pertenecen y que han de volar solos aunque no nos guste lo que hagan. Creo que tener puntos en común ocn ellos si es bueno y sunamente gratificante para ambos...
ResponderEliminarBesos preciosa
Anita:
es que no hay filosofía que valga para la sinrazón de tomar la pelea como un deporte :)
Besos
Sergal:
Le doy mucha importancia que tengas esa deferencia conmigo. Espero que estés mejorcito.
Mucísimas gracias por este detalle.
Un beso grande
Herma:
Precioso comentario...Gracias por reconocer mi voz.:)
Besitos preciosa.
El huérfano:
Siempre tan amable en tus comentarios. El doble filo llamaría yo a la dificil labor de la educación. Por mucho que crees hacer lo mejor, a veces no se obtienen los resultados esperados.
Besos
Hace años que no la escucho y como aqui no puedo ver vídeos me tocara verlo en casa
ResponderEliminarbesos
buenas:
ResponderEliminara veces no sentimos lo que sufren por nosotros los que se preocupan y nos quieren hasta que lo sentimos por otra persona...
Gracias por la visita y por el aviso de Sergal, no tenía idea. Ando desconectada pero espero regresar en breve. Por aquí todo bien, espero tu tambien.
Un beso...
he venido a leerte otra vez, sentir la soledad que la inseguridad que le acompaña a veces el boxeador, y Dios! escribes tan bién!
ResponderEliminarUn post precioso, aunque no me guste el boxeo.
ResponderEliminarBesos.
Amateur que te van a pilllar!. Espero que te siga gustando.
ResponderEliminarBesos.
TEQUILA:
A veces resulta más fácil ver la probelmática del veicno que la nuestra...la que nos toca más de cerca.
Besos
El HUERFANO:
Supongo que esa soledad es común a todos los deportes de riesgo...tambien se me ocurre a un monólogo en teatro..
LAURA:
Me horroriza el boxeo. Gracias porla visita.
besos
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMe dejas pensativa con este bellísimo relato. Hubiese querido resaltar alguna frase para comentar. No puedo, todo es destacable. De principio a fin destila emotividad.
ResponderEliminarRecuerdo la canción.
Un Besazo
Hoy siento el sufrimiento del boxeador, me siento golpeada y no sé porque ¡,, quzas que los deseos n se cumplen, la llamada no llega, el amor s me va olvidadano
ResponderEliminarYolanda, la verdad es que fué etapa triste en la vida de Georgina. Gracias por el comentario.
ResponderEliminarBesos preciosa
El huérfano:
Lamento que te sientas en ese estado. Quizás ponemos demasiadas expectativas en algo o en alguien, sin pensar en el daño que nos hace la situación.
Saludos
Precioso, veo que compartimos gustos musicales... Abba, Simon & Garfunkel... gente que canta diciendo algo en sus letras.
ResponderEliminarBesos